No, no crean que estoy
hablando acerca de los modos y formas o cualquier tipo de herencia que haya dejado Mourinho en Madrid, ni mucho menos de algun pseudo periodista
madridista (Roncero); estoy hablando del grave problema en que se encuentra Madrid en
estos momentos.
Desde hace
aproximadamente 10 días, el ayuntamiento de Madrid anuncio recortes en su
presupuesto en relacion a los servicios de limpieza, como era de esperarse los empleados
de este sector inmediatamente se fueron a huelga y la ciudad ha quedado
literalmente hundida en su propia basura.
Con todo el cariño
que le tengo a la ciudad este es un tema "espinoso" para mí. Ver imágenes
de la basura acumulándose en lugares emblemáticos me hace reflexionar... de
verdad Madrid y su gente se merece esto? Obviamente no, pero a mi forma de ver
esto es solo el reflejo de su comportamiento y de las prioridades que sus gobernantes marcan.
Esta situación
me recuerda una historia… En Querétaro, en la casa de mis padres siempre hemos
tenido la fortuna de contar con el apoyo de alguna señora que nos ha ayudado a
las labores domésticas y regularmente han sido personas con recursos limitados
y/o de algún pueblo o rancho cercano a la ciudad, por lo que las condiciones de
vivienda que tienen no son las más agraciadas, a veces son personas con historias
complicadas, con crisis económicas, infidelidades, problemas familiares, pareciera que siempre estan luchando con el
fastidio y pesadez de recorrer grandes distancias para llegar al punto de
trabajo...parece algo triste o a lo mejor esa era la apariencia que querían
mostrarnos, pero bueno, ese no es el punto. El punto es que en más de alguna ocasión
nos tocó a mi familia y a mi asistir a una fiesta o celebración organizada por
ellos, llámese bautizo, xv años, primeras comuniones, etc... y mencionare en
especial una fiesta, la de los xv años de la hija de Doña Mary.
Doña Mary
era una señora madura, fuerte, acostumbrada a trabajar duro, sus padres fueron
gente de bien, de pueblo, de raza, orgullosa por lo que eran, defendían sus
costumbres y sus ideales, le enseñaron a valorar el trabajo y los frutos de su
trabajo; por lo tanto, Doña Mary era muy similar a ellos, amable, siempre
cordial y dispuesta a ayudar, preparaba comida deliciosa y siempre sabia
ofrecerte algo... y un día, nos invitó a la fiesta de celebración de xv años de
su hija... no la conocíamos, y conocerla fue una sorpresa.. ya que la niña era
diferente a su mama.
De buena manera y con honradez, la niña estaba
acostumbrada a tener comida en la mesa, pero sin conocer el esfuerzo que
costaba llevarlo a su casa... por lo que tenía cierta arrogancia, arrogancia de
que esa que tienen los adolescentes con sus iPhone, creyendo que tienen todo al
alcance de la mano... esto principalmente era fruto de ver a otros jóvenes con más
posibilidades económicas que ella, esos compañeros tenian grandes proyectos y grandes celebraciones, ella se comparaba con ellos y quería lo mismo… así
que ella, exigía una fiesta igual de grande que la de sus compañero, en fin… los xv años de Anita (así se llamaba la hija
de doña Mary), fueron una celebración en grande... como solo ellos sabían
divertirse.
Para mí, la
forma de celebrarlo al principio fue sorprendente, banquetes abundantes, 200
invitados, música en vivo, bebida y baile a destajo, todo eran risas... y después? pues despues a continuar con
la vida normal, la vida dura de trabajos pesados y mal pagados para liquidar los compromisos adquiridos por esos bacanales ... así eran la mayoría
de las celebraciones y de personas, tan así que se hicieron cotidianas, ya no había
ni sorpresa, era normal ver tanta abundancia y sonrisa y después volver al esfuerzo, a
las quejas... todo era así o sigue siendo así, sin sorpresa hasta que en algún
momento me detuve a pensar en ello... me detuve a pensar: y todo esto... cuánto
costo?... el esfuerzo de Doña Mary vale la pena?... y me lo preguntaba cuando
observaba carencias significativas en su modo de vida que fácilmente podrían
haberse subsanado ocupando los recursos que fueron destinados a la celebración
de xv años de su muchachita...
Observaba
que era muy importante dar la apariencia de abundancia y prosperidad económica,
del bienestar familiar... por qué si no, imagínate nada más que vaya a decir
Doña Toñita la de la tienda de la esquina si no le festejaban las xv primaveras
a la señorita de la familia... lo importante era estar en el ojo de la
sociedad, de su sociedad...no importaba que después de la fiesta faltara algo básico
en la casa... de todos modos la niña estuvo contenta con su fiesta, ya después Dios dirá...decian.
Todo esto sin importar las deudas y compromisos adquiridos, lo importante es que en ese
momento fuera todo perfecto, todo dentro de lo que se esperaba, todo tan
placido, todo tan relajante... tan relajante como tomarse una taza de café con leche en
plaza mayor.
Pues en que veo a Madrid como a
Doña Mary... con esa falta de organización en las prioridades… eso a mi forma de ver, es lo
que tiene a Madrid sumergido en su propia basura... la opulencia y arrogancia de querer ser (sin
importar las formas) una ciudad olímpica... gastando dinero en grandes banquetes, viajes para promover esa fiesta... preocupandose y creando polemicas por que a Messi le daba igual que Madrid fuera ciudad olimpica... ofendiendose por que un anciano (Blatter) en sus horas de salida dice que su idolo gasta en peluqueros, gastando y gastando consintiendo visores olimpicos... y si ese dinero se hubiera ocupado mejor para el sector de limpieza?... no se las cantidades, ni las investigare, pero seguramente hubieran ayudado en algo.
Ya me imagino al gobierno de Madrid pensando como Doña Mary... (si Madrid no es ciudad olímpica, imagínate, que van a decir los catalanes?)... . spain is different.
Ya me imagino al gobierno de Madrid pensando como Doña Mary... (si Madrid no es ciudad olímpica, imagínate, que van a decir los catalanes?)... . spain is different.
Es una pena ver imágenes de
Madrid así… de la mano de la festejada, de la hija de doña Mary… de la mano de
Anita (Botella)
Pongo el link, verdaderamente no tiene desperdicio…
La historia de una pata de Jamon.